Grullas "Eran siete“

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Grullas

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"Eran siete“
• En Osetia del Norte hay un pueblo de dzuarikau,
donde vivía la familia Gazdanov. Tuvieron siete hijos y
sus padres fueron felices. Y no tuvieron tiempo de ver,
llegó la segunda guerra mundial. El primer hijo fue al
frente de inmediato y murió en el mismo año, cerca de
Moscú. En 1942, la guerra se llevó a dos hijos más de
Gazdanov, ambos se convirtieron en héroes y
murieron durante la defensa de Sebastopol. La madre
no pudo soportar tales noticias – los tres hijos ya
estaban en fosas comunes, la mujer murió de dolor. Y
el padre una y otra vez resistió los golpes del destino:
uno tras otro, los niños murieron en las batallas de
Novorossiysk, Kiev y Bielorrusia.

3.

• Ya había seis de ellos. Seis sobres funerarios,
como pájaros con alas caídas, yacían sobre la
mesa mientras el padre cuidaba a la única nieta
que quedaba del primer hijo y esperaba a su
último hijo. Y esperó…El cartero, que trabajaba
en este pueblo, se negó a llevar el funeral, que
llegó a su último hijo. Murió en la toma de Berlín
al final de la guerra, en 1945. Los ancianos de la
aldea decidieron traer la triste noticia ellos
mismos, y cuando el anciano vio el último sobre,
su corazón se detuvo.

4.

• Más tarde, en 1963, se
erigió un monumento a los
años de guerra en el
pueblo: una madre afligida
se encuentra al pie de una
gran roca, y siete grullas
vuelan sobre su cabeza.
Se despiden de ella y de
la tierra que han protegido
a costa de sus vidas.

5.

• Una vez este monumento en sus viajes fue visitado
por el famoso poeta Rasul Gamzatov. Después de
conocer la historia de los siete hijos y la familia
Gazdanov, el poeta escribió uno de sus poemas más
famosos, primero en su lengua materna, el Avar.
Originalmente, la canción cantaba sobre jigits. Y la
traducción que escuchamos hasta ahora pertenece a
Naum Grebnev. Ya se habla de soldados.